Análisis Hombre a Hombre del Preolímpico y Proyección a RIO 2016.

Miércoles 16 de Septiembre de 2015                                                               

Una vez terminado el Torneo Preolímpico de México, donde Venezuela contra todo pronóstico logró ganar el título continental por primera vez y con la euforia aun fresca de la llegada de los jugadores vamos a realizar un análisis hombre a hombre de nuestra selección.

Cabe destacar que el hecho de que un jugador haya participado en este torneo, con todo y escribir su nombre en la historia de nuestro deporte y en particular del baloncesto, no le garantiza un boleto fijo a los Juegos Olímpicos, muchos factores influyen, como lesiones, bajo rendimiento deportivo y la aparición de otros jugadores que por distintas razones no pudieron participar en este torneo pero tendrían las puestas abiertas para retornar y ganarse un puesto.

Cesar García (Escolta, Cocodrilos: 1pt, 0.5rb, 2p (100%), 3pt (0%).
Proyección: Difícil que asista a RIO.

El hombre numero 12 de la selección, en su primera incursión jugó poco y no pudo encestar desde los 3pts que es su fuerte. Para ser sinceros solo participó en 6 juegos jugando un total de 27min. Tiene el panorama cuesta arriba pues esta vez no participaron jugadores como Gregory Echenique, Luis Bethelmy, Anthony Pérez y Greivis Vásquez.

Javinger Vargas (Alero, Trotamundos: 3pt, 2rb, 2pt (100%), 3pt (29.4%).            
Proyección: Pelearía por el puesto 12.

Aunque los números no lo muestran fue de los debutantes el que más destacó, un jugador al cual hemos seguido y firmemente pensamos que el formato actual de la LPB y su equipo (al no cederlo ni darle minutos) perjudican. Javinger mostró la incomprensible lógica de que puede jugar a nivel FIBA pero no es lo suficientemente bueno para la LPB. Un contrato para jugar en Uruguay tal vez le dé el “status” y minutos para jugar en ambas ligas. Debe reforzar su físico y consolidarse para aspirar a un puesto, su versatilidad y lanzamiento exterior (puede desarrollares como un “3 y D”) es su carta de presentación, de lo que mejore este año y las oportunidades que reciba para ello dependerá su consolidación.

Miguel Marriaga (Centro, Toros: 0.6pt, 1.5rb, 2pt (14.3%).                    
Proyección: Pelearía por un puesto.

Un torneo bastante discreto para Miguel, aquejado por varias lesiones (espalda, tobillos, etc.) ofensivamente no tuvo impacto en el torneo siendo uno de sus peores, apenas si pudo aportar con su defensa en la semifinal y final. En esta etapa de su carrera ya no es el jugador móvil y atlético que una vez fue, ante la escasez de estatura si tiene una buena temporada pudiera hacer el equipo. Cabe destacar que Néstor “Che” García siempre le ha dado la confianza y ha tenido un rol para él, sin embargo, en estos momentos se ve difícil que haga el equipo.

Dwight Lewis (Escolta/Alero, Trotamundos: 3.8pt, 1.6rb, 2p (30.3%), 3pt (23.5%).           
Proyección: Pelearía por un puesto.

Este fue un torneo de altas y bajas para Lewis, aun cuando se vio mucho mejor contra equipos como Canadá y Puerto Rico, mostro serias deficiencias a la hora de convertir cerca del aro, haciendo típicamente lo más difícil y quedándose corto a la hora de la definición. Cuando el juego se hace de ida y vuelta su capacidad atlética sobresale, pero tanto ofensiva como defensivamente debe mejorar mucho, otro jugador al cual las futuras incorporaciones pudieran afectar seriamente.

David Cubillan (Base, Trotamundos: 6.1pt, 1.9ast, 2p (30.3%), 3pt (31.1%).         
Proyección: Casi seguro entre los 12.

David se recuperó de su lesión justo a tiempo para participar en el torneo, lució bien físicamente y aun cuando no estuvo del todo fino desde la larga distancia mostró que es un jugador para este tipo de torneos. Formo parte del tridente de bases y dependiendo de la configuración de la selección bien podría ser el tercer base ideal o quedar fuera en un último corte. Aun cuando su actuación amerita una seria consideración, habría que evaluar en torno a los jugadores que se integren y al rol que estaría cumpliendo. El tridente de bases funcionó muy bien y esto le otorga serias posibilidades de hacer el equipo.

Miguel Ruiz (Ala Pívot, Trotamundos: 2.6pt, 5.5rb, 2pt (55%).                   
Proyección: Casi seguro entre los 12.

Otro jugador al que el formato de 3 importados LPB perjudica (al igual que la directiva de su equipo). Mostró una capacidad atlética y sentido del oportunismo asombrosa durante el torneo, su habilidad para tomar rebotes y defender a pívots, aleros y hasta escoltas es muy valiosa. Miguel en realidad debería ser lo que se denomina un “3 and D” (alero con buena defensa y capaz de anotar el triple), sin embargo, si es capaz de desarrollar alguna herramienta ofensiva (tiro de media distancia, juego de pick and roll o juego interior) seria definitivamente una fija. Recientemente firmó para jugar en Argentina, experiencia que bien pudiera potenciarlo para hacerse un hueco en el equipo. Lo cierto es que los “intangibles” de Miguel no los aporta ningún otro jugador y el “Che” García lo tiene claro.

Heissler Guillent (Base, Guaros: 8.1pt, 3.3ast, 2p (43.8%), 3pt (45.2%).            
Proyección: Pelearía el puesto de base titular.

Definitivamente el jugador que más se benefició con la ausencia de Greivis Vásquez. Con números lejos de ser espectaculares, pero con una soberbia actuación en la semifinal y final convirtiéndose en “go to guy” o hombre clave para manejar la ofensiva (y producirla),  en los partidos cerrados Heissler indiscutiblemente se ganó su boleto a RIO. Jugadores que sean capaces hacer lo que el logró ante Canada en la semifinal y Argentina en la final no crecen en cualquier árbol así que la única pregunta es si Heissler será titular o no. Su elusividad, visión de cancha y excelente porcentaje desde la larga distancia lo hacen ideal para jugar en cualquier esquema de 2 bases. El base del equipo ideal aun no tiene definido donde jugará la próxima temporada (seguramente tendrá una oferta del exterior) y aun cuando físicamente no es el más dotado, ha demostrado que para este tipo de torneos es un caballo y que es una ficha clave para Néstor “Che” García a la hora de cerrar los juegos.

Windi Graterol (Ala Pívot/Centro, Guaros: 9.3pt, 3.3rb, 2pt (52.8%), 3pt (32.3%).                   
Proyección: Pelearía el puesto de centro titular.

Otro caso más de un jugador que un técnico extranjero (Eric Musselman) tuvo que sacar de la banca de un equipo LPB (Cocodrilos) para que destacara en un torneo internacional, caso que se repite constantemente en nuestro baloncesto. Windi demostró nuevamente en este torneo que a nivel FIBA tiene la suficiente calidad y herramientas para producir sólidamente en torneos de este tipo. Aun cuando no es un rebotero nato, su versatilidad ofensiva (excelente juego de pick and roll y muy mejorado tiro exterior) lo hace un jugador indispensable para la selección. Idealmente pudiera desempeñarse como “Strech 4” (puesto 4 con capacidad para anotar a distancia), la falta de estatura de la selección lo obliga a jugar de centro, donde da ventajas defensivas pero también aprovecha su rapidez y buena mano para producir en ofensiva. Su explosión ante Canada donde fue jugador clave para la victoria y su aporte en la final sellaron ya su boleto para RIO.

Gregory Vargas (Base, Maccabi Haifa de Israel: 8.4pt, 4.4ast, 1.5 rob, 2p (65.1%), 3pt (16.7%). 
Proyección: Pelearía el puesto de base titular.

Base titular durante todo el torneo y con contrato para jugar en Europa, Gregory tuvo un extraordinario campeonato, jugando con intensidad defensiva (líder en robos) e inteligencia. Mostró mucha visión de juego y excelente capacidad de penetrar y convertir cerca del aro, fue parte del tridente de bases que tantos dolores de cabeza dio a los rivales de la vinotinto. Su talón de Aquiles es el lanzamiento exterior que no estuvo efectivo en este torneo, su capacidad defensiva/ofensiva y su muy mejorada conducción y visión de cancha lo hacen una fija para los Juegos Olímpicos, cuál será su rol? Dependerá de la competencia y la conformación del equipo.

John Cox (Escolta, Le Havre: 12.2pt, 3.1rb, 2p (53%), 3pt (23.7%).            
Proyección: Escolta titular.

Líder anotador de la selección en el preolímpico, Cox se gano un puesto en la titular de RIO durante el torneo, yendo de menos a más en su actuación, calando en el grupo como uno más y “destrabando” la ofensiva criolla una y otra vez, se erigió como el hombre que conseguía los canastos cuando la ofensiva se estancaba (y única vía de anotación constante y confiable). Si bien tiene sus limitaciones defensivas su esfuerzo en ese costado de la cancha está a la par con el grupo. Cox mostró a este nivel es un anotador versátil y creativo que no desentona para nada con el esquema de juego en conjunto (cosa más fácil de decir que de lograr), jugador inteligente que sabe aprovechas los emparejamientos debe ser una fija en el quinteto titular de la selección.

José Vargas (Alero, Marinos: 8.5pt, 2.5rb, 2pt (45.1%), 3pt (23.3%).            
Proyección: Alero suplente.

A estas alturas de su carrera el “Grillito” es un alero pues no tiene la movilidad para defender escoltas. El veterano y capitán de la selección fue de más a menos durante el torneo, donde pareció pegarle a nivel físico y donde el constante choque con jugadores de mayor envergadura le pasó factura. A pesar de eso, comandó un equipo que no dependió de individualidades y aun cuando abusó por momentos del tiro exterior, también se mostró oportuno en ofensiva y defensivamente mostró toda la veteranía para siempre aparecer en los momentos difíciles, como en la final contra Argentina en par de oportunidades claves los minutos finales. Ante equipos atléticos pareció costarle y más a medida que avanzó el torneo pero sin embargo, el capitán de este equipo debería tener el boleto seguro para RIO.

Néstor Colmenares (Ala Pívot, Cocodrilos: 9.8pt, 6rb, 2pt (55.4%), 3pt (22.2%). 
Proyección: Ala Pívot titular.

Néstor aparte de ser uno de los jugadores más consistentes del equipo fue erigiéndose como un líder a medida que se desarrolló el torneo. Cuenta dentro de su arsenal ofensivo tanto con el pick and roll como buenos movimientos de poste bajo y ha ido añadiendo como diría Julio Toro un tiro exterior con mucho “sabor”. Líder rebotero del equipo tuvo que fajarse con todo tipo de internos durante el campeonato y nunca desentonó, aun cuando en defensa todavía tiene mucho que mejorar (se nota perdido a veces), su talón de Aquiles siempre han sido los tiros libres (donde se vio mejor a hacia el final del torneo) también mostró olfato para robar balones y estuvo siempre presente en los momentos clave de la selección, fue el jugador que más minutos jugó y cuenta con el respaldo total de Néstor “Che“ García. Colmenares también tiene ofertas para jugar en Argentina y México y si continua mejorando su tiro exterior sería un “Strech 4” ideal que acercaría a nuestra selección al baloncesto moderno. Uno de los caballos de esta selección y pareciera ser uno de los referentes a futuro.

Néstor “Che” García / Cuerpo Técnico.

El muy criticado (a mi juicio sin razón) entrenador de la selección, demostró por qué está considerado como uno de los mejores entrenadores de la región. En un proceso que lleva 3 años y en los que se han recogido frutos (Titulo Sudamericano y de las Américas), el “Che” ha logrado romper con la “rosca” (al igual que lo hizo Musselman) y dejar atrás los “nombres” para formar un verdadero EQUIPO, donde como ya lo dijimos antes, los jugadores jueguen mas para el equipo que para ellos mismos.

Con un concepto de equipo establecido y donde cada jugador aporta algo diferente y no es necesario ensamblar un “All Star” para lograr el éxito a este nivel, el “Che” supo armar un conjunto de 12 jugadores, donde cada quien aportaba lo suyo para con trabajo, química y mucho sacrifico logar que el equipo sea mucho más que la suma de sus partes.

A nivel de la llamada “identidad” Néstor fue capaz de convencer a los jugadores que con el recurso humano con el que se cuenta hay que trabajar de una forma distinta para obtener resultados a nivel internacional. No solo es el orden, la intensidad defensiva, la ofensiva pausada y de varios pases (que desgasta defensivamente al rival) sino la aplicación táctica del equipo, capaz y concentrado para hacer las jugadas correctas en el momento indicado.

Esto no puede pasar desapercibido, pues el primer juego con Argentina se pierde en par de errores tácticos de no cortar con falta (cuando no se está en colectivas), posesiones de cierre en los cuartos 2 y 3. Los correctivos no se hicieron esperar y la selección retomó la excelencia táctica y dejo atrás los errores infantiles que desencadenaban rachas negativas y que nos hundían definitivamente para dejar escapar los juegos.

Una coordinada defensa mayormente individual con rotaciones precisas y mucha sacrificio junto con una ofensiva “sazonada” con diversidad, donde siempre estaba el objetico de aprovechar el tiempo de posesión al máximo y hacer trabajar en defensa al equipo rival, donde el pase extra y el tiro abierto siempre fueron el objetivo, logró el equilibrio preciso para obtener éxitos nunca antes logrados (aun cuando se disponía de más talento).

Planteamientos de juego acertados que denotan estudio profundo del rival y la capacidad de ajustar estrategias durante el encuentro, sabiendo motivar a los jugadores y brindándole herramientas útiles para solventar diversas situaciones de juego fueron la constante en el banquillo criollo.

Carmelo Cortez / FVB.

El acierto principal de la gestión de la FVB en el proceso de Néstor “Che” García (y parte del de Eric Musselman) fue el entender que la planificación es indispensable para lograr los éxitos, el designar al equipo de trabajo del Lic. Oswaldo Narváez para realizar la preparación una vez dispuestos los recursos por parte del Ministerio del Deporte, permitió contar con un proceso de preparación de la Selección Venezolana de Baloncesto sin precedentes en la historia del deporte.

Aun cuando se contaron con sensibles bajas por el camino y tropiezos como la negativa actuación de los Juegos Panamericanos de Toronto, se continuó con el plan de trabajo, confiando en lo que este grupo lograría y dándole continuidad al trabajo serio y profesional. Si bien esta no es la primera vez que nuestra selección se prepara en el exterior para un torneo de envergadura y cabe destacar que este tipo de planificación se viene haciendo desde hace un par de años, una preparación de casi 3 meses de duración y con el alto nivel de la oposición enfrentada durante este proceso, no es solo destacada aquí por nosotros sino es vista como camino a seguir por la mayoría de los países del continente.

Aun cuando la FVB tiene serias deudas con el desarrollo estancado y en franco retroceso del baloncesto menor, así como diferencias abismales con el baloncesto femenino y el tema de la comunión con la LPB para garantizar mas minutos en cancha para los criollos, es necesario destacar que el aporte realizado por el grupo de trabajo en la realización de diversos torneos de envergadura en nuestro país, así como el roce y la competencia que se le ha venido brindando a esta selección dio como fruto este logro sin precedentes en nuestro deporte. Todo esto suma, y aun cuando muchos opinaban que torneos y preparación eran un “perdida de dinero” sin estos es casi imposible lograr resultados en nuestros días.

Ahora el objetivo no es solo los Juegos Olímpicos de Rio, sino que el reto mayor es como potenciar nuestro deporte para evitar caer en la picada terrible que se dio después de los “Héroes de Portland” (que coincide con la creación de la LPB). Modernizando nuestro baloncesto, haciéndolo cada vez más capacitado en todas sus facetas para lograr desarrollar de manera sostenida el vasto talento que para esta disciplina se cuenta en el país. Ese debe ser el objetivo, para que no tengamos que esperar nuevamente más de 20 años para un logro de esta magnitud.

Por Rafael Carrillo
@Rafa_Carrillo