Hay que profesionalizar el baloncesto menor

Viernes 01 de junio de 2012                                                                       

La pasada semana se jugó en la ciudad de Maldonado en Uruguay el Suramericano Sub 15, en el cual Venezuela se quedó una vez más fuera de los cuatro primeros luego de caer ante Chile en la primera ronda.

Con esto ya se acumulan 10 años en los cuales Venezuela no ha logrado clasificar a ninguno de los dos eventos de menores que rige FIBA bajo las categorías de cadetes y juvenil, los cuales se juegan cada dos años.

Venezuela en los noventa vivió su mejor época en el baloncesto juvenil clasificando a tres torneos al hilo, incluyendo un subcampeonato americano con victoria histórica ante el equipo de Estados Unidos, que incluía a actuales estrellas de la NBA como Deron Williams y Carmelo Anthony, además de esa misma generación ubicarse en el noveno lugar en el campeonato mundial de 2003, la mejor posición lograda por selección alguna en torneos mundiales.

Pero a partir de ese momento, en la cual se logró llegar a la cúspide entre las actuaciones anteriores, los resultados no han vuelto a venir, sobre todo en los últimos torneos.

No solamente el hecho de que Venezuela no haya regresado a un Campeonato Mundial e inclusive a un premundial, más grave es que se esté perdiendo con naciones las cuales hasta no hace mucho estaban muy por debajo de nuestro nivel en todas las categorías.

Derrotas ante Chile en el Suramericano Sub 15 de 2010, contra Colombia también en el Sub 15 en el año 2011, par de derrotas ante Colombia y Chile en el Sudamericano Juvenil de 2011 y la más reciente contra Chile son los descalabros que nos ha bajado de los primeros 4 equipos del subcontinente. Eso sin nombrar que comúnmente se está perdiendo contra Argentina y Brasil por 30 puntos o más.

Un denominador común tienen estos fracasos, todo apunta a la escasa preparación que reciben las selecciones antes de enfrentar estos torneos, 15 días máximo un mes es el tiempo en la cual los equipos se concentran.

Pero pensamos que va más allá de eso, así se aumenten la cantidad de días de concentración, los cuales pueden sonar inviables debido a los compromisos estudiantiles de estos menores, que no pueden abandonar sus estudios por mucho tiempo para atender los compromisos de la Selección.

La estrategia actual para escoger a los jugadores pasa por hacer un torneo nacional donde participan algunos estados del cual se seleccionan los jugadores, muchas veces el entrenador de turno, que siempre es designado a última hora, no presencia estos eventos por tener compromisos con equipos profesionales.

Es decir que en Venezuela prácticamente los jugadores de categoría menores solo juegan un torneo de alta competencia al año el cual dura una semana, atrás quedaron los días de la Liga Nacional Juvenil, clave del éxito de las tres selecciones mundialistas.

En los últimos días se ha anunciado el renacer de la Liga Nacional Juvenil, siendo catalogada como la cuarta división de la Liga Nacional, en la cual el equipo campeón podría subir a la tercera división en caso de tener las condiciones necesarias.

A pesar de esta buena noticia es necesario incorporar a los equipos profesionales de Venezuela en el baloncesto menor, no solo a los de la LPB sino también a los de la Liga Nacional, bajo una premisa: el desarrollo de los jugadores.

Si hay un ente al cual le sea más importante desarrollar jugadores, que inviertan tiempo y recursos en estos diamantes en bruto son los diferentes clubes del baloncesto nacional, tomando a estos jugadores desde que son cadetes o antes e irlos preparando pensando en que sean sus figuras una vez estén listos para dar el paso al profesional.

Los equipos cuentan con los entrenadores y preparadores físicos, a parte del gran incentivo que significaría para un joven lucir y defender los colores de los clubes de los cuales son seguidores, y verán esto como una oportunidad de lograr su sueño de ser un profesional en este deporte.

El baloncesto de Asociaciones no está dando los resultados, más allá de que se les de los recursos el enfoque que se tiene es el de ganar, y bajo esta premisa se escoge a aquellos jugadores que estén más avanzados para definir sus equipos sin ver más allá, sin ver si en un futuro estos jugadores tendrán la estatura y el físico suficiente para llegar a ser jugadores de primer nivel.

Por eso vemos a muchos jugadores con escasa estatura desempeñándose en el área de la pintura, y los que son altos tienen pocas destrezas al comenzar tarde por la falta de alguien que los reclutara y les diera las herramientas y los minutos para desarrollarse.

Un buen ejemplo de trabajo con un jugador joven lo vemos con el alero venezolano Jhornan Zamora, el cual deslumbró en los tres primeros juegos con la Selección Nacional pese a estar debutando con la vinotinto.

Zamora está en España desde los 15 años siendo parte de las divisiones menores del Valladolid y del Málaga, ahí Zamora jugó desde cadete y juvenil, además de pasar por los equipos filiales de estos conjuntos tanto en la EBA como en la LEB Oro, fue un trabajo progresivo que terminó ubicándolo en la ACB con 23 años de edad.

También vemos equipos como el Barcelona de la misma ACB, el cual recluta jugadores no solo españoles sino también de otras nacionalidades, como es el caso del serbio-venezolano Stefan Peno el cual ya forma parte de sus filas con solo 14 años, a este y otros jugadores los están formando para que en un futuro vistan el azulgrana.

Se puede también dar como ejemplo al joven Jesús Medina, el cual fue el jugador más destacado en el pasado Suramericano Juvenil del año 2011 por Venezuela, en donde terminó con 14.9 puntos y 11.25 rebotes. Medina venía de jugar una campaña completa en la Liga Especial con el equipo filial de Guaiqueríes de Margarita, es decir que este jugador, a parte de su calidad, tuvo continuidad en su juego y una formación de parte de los coach del equipo margariteño.

Por eso pensamos que una alianza Federación, equipos profesionales y Ministerio del Deporte, es la vía para mejorar el desarrollo del baloncesto menor en Venezuela, lo cual influirá positivamente tanto en las selecciones nacionales como en los mismos equipos al tener jugadores mejores preparados para el baloncesto profesional.

Por Antonio Ruiz